
Casa H es un proyecto que tiene como punto de partida una estructura básica, que formaba un bloque sólido y básico.
Proyecto que llegó a nosotros como una construcción básica ya iniciada. En un inicio era muy compacto y cerrado, así que nos correspondió reorganizar la distribución de las áreas, generando espacios mucho más amplios y fluidos.
El programa arquitectónico tan amplio como las necesidades de una familia de cinco integrantes (profesores e investigadores universitarios y sus tres hijos), nos dejó claro que no podía ser contenido en un espacio cerrado, máxime con el gran terreno disponible.
El concepto era descomponer el prisma básico en una organización de volúmenes, creando secuencia de espacios abiertos y cerrados, logrando transiciones entre estos. Una paleta de materiales y colores sobrios y atemporales junto con una luz natural.
Las vistas al exterior tienen una constante; esto para aprovechar las vistas generadas por el diseño del paisaje, que contempla una terraza, una alberca, jardines y un salón de fiestas aislado, que no permitiera que el ruido llegara hacia los dormitorios.
Ingresando a la casa, un patio interior nos da la bienvenida, jugando con la escala y trasladando la naturaleza hacia dentro. Logramos integrar el espacio exterior con la jardinería y la terraza.
Un salón multifuncional (gimnasio o salón de fiestas) que tiene entrada independiente a la casa; si bien es una caja de cristal, cuenta con un colchón vegetal y muros que evitan que el ruido de algún evento llegue a molestar a alguien en el interior de la casa.
El empleo de materiales rescata el uso de tabiques como en fachadas antiguas. El respeto por el legado de nuestros antepasados dio origen a la paleta que empleamos en todo el proyecto, logrando unidad y un lenguaje potente.